¿Sabías que 617 millones de niños y adolescentes en el mundo no logran alcanzar los niveles mínimos de conocimientos requeridos en lectura y matemáticas? 387 millones en educación primaria y 230 millones en la secundaria inferior. Son datos del Instituto de Estadística de la UNESCO que revelan, en palabras del propio organismo, “una crisis de aprendizaje que podría poner en riesgo el avance hacia la materialización de la Agenda para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Alfabetización 3.0
Pero el concepto mismo de alfabetización ha sufrido un gran cambio en los últimos 20 años: actualmente, a las competencias básicas de lectura, escritura y cálculo, debemos añadir las competencias digitales, esto es, aquellas que, según UNICEF, permiten a niñas y niños “realizarse y prosperar en un mundo digital cada vez más global, estando a la vez seguros y empoderados, de maneras adaptadas a su edad y a las culturas y los contextos locales.”
Sin embargo, la pandemia puso de manifiesto la gran brecha digital que persiste en términos de conectividad, infraestructura y capacidad de uso de la tecnología. Según la Unión Internacional de Telecomunicaciones, casi la mitad de los habitantes del mundo (3.700 millones) no utilizan Internet.
Este año, el Día Internacional de la Alfabetización pone el foco en las interacciones entre la alfabetización y las competencias digitales centrándose en aquellos factores que propician que la alfabetización se base en tecnología inclusiva y útil para que nadie se quede atrás. En el Observatorio queremos unirnos a la celebración destacando algunos programas que propician la alfabetización a través de la tecnología.
Kukua, el superpoder de la alfabetización
Sema es una súperheroína keniata: su súperpoder es el de la alfabetización. Sema es una niña de 10 años que está enseñando a millones de pequeños africanos a leer, escribir y calcular a través de un videojuego y una app. Utiliza la tecnología para resolver diferentes retos en su comunidad, ayudada por su hermano. A través de este juego, los niños aprenden inglés y Swahili, aunque, durante la guerra civil en Siria, su creadora adaptó la app para ayudar a los niños refugiados. Puedes leer el post aquí.
Worlreader, el mundo del libro en un bolsillo
Un exejecutivo de Amazon, un orfanato en Ecuador y un candado fueron el origen de Wordreader una organización sin ánimo de lucro que fomenta la lectura a través de libros electrónicos y teléfonos móviles. Desde 2010, más de 10 millones de usuarios en 49 países han leído en su biblioteca digital que contiene alrededor de 40.000 libros electrónicos. Averigua más en este post.
iMlango, educación digital en Kenia
En Kenia, un millón de niños no van regularmente a la escuela debido a problemas económicos, sociales o relacionados con el entorno. IMlango es un programa integral de educación digital cuyo objetivo es mejorar los resultados escolares de 285.000 niños kenianos en matemáticas, lectoescritura y habilidades para la vida. Lo hacen ofreciendo acceso a servicios y contenidos digitales. Aquí puedes leer un post sobre ello.
ODILO, una plataforma de contenidos ilimitada y personalizable
Odilo pretende solucionar la falta de acceso a contenido digital de calidad para contribuir a la igualdad educativa a través de bibliotecas digitales inteligentes, y soluciones de aprendizaje que incrementen el nivel de comprensión lectora de los alumnos y faciliten la labor del docente. Odilo conforma una especie de “ecosistema ilimitado de aprendizaje” en el que docentes y alumnos pueden diseñar planes a medida de sus clases y sus alumnos. Si quieres saber más sobre Odilo, clica aquí.
Kitkit School, un programa digital para niños especiales
Recibe su nombre del tailandés (Kitkit significa pensar en Thai) aunque sus creadores son coreanos: una pareja de ingenieros que inspirados por su hijo, un niño con necesidades especiales, decidieron dedicar su talento a diseñar juegos y aplicaciones accesibles que ayudarán a cualquier niño a aprender solos. “¿Qué apariencia debe tener un contenido educativo destinado a niños poco motivados? ¿Cómo ayudar a un niño que no está listo para aprender el currículo escolar? Y de esas preguntas nació Kitkit School, un plan de estudios integral, basado en tablets y apps digitales, diseñado para proporcionar a los niños las bases y la práctica necesarias para desarrollar habilidades fundamentales en lectoescritura y aritmética, independientemente del acceso que tengan a una escuela o recursos. Para saber más sobre esta iniciativa, visita este post.
