Para ProFuturo, Angola es un lugar muy especial porque es allí donde comenzamos nuestra andadura en nueve escuelas de Luena, en la provincia de Moxico, a finales de 2015. Durante el mes de mayo, los miembros del equipo de ProFuturo, Cleide da Silva, Valeria Cruz y Enrique Vázquez, regresaron al país angoleño en el que conviene recordar que, además de su gran tamaño (más de un millón de metros cuadrados), coexisten más de 40 lenguas, en las que tienen cabida el portugués y el español.
En ProFuturo continuamos ampliando la formación a profesores en nuevas escuelas de entornos vulnerables en Angola, un país en el que sus habitantes tienen un muy bajo nivel de vida si tenemos en cuenta que su PIB per cápita en 2016 fue de 2.989€, un 14% menor que en 2015. El Índice de Desarrollo Humano, elaborado por Naciones Unidas para medir el progreso de los estados, lo corrobora.
Para nosotros, Angola es un lugar muy especial porque es allí donde comenzamos nuestra andadura en nueve escuelas de Luena, en la provincia de Moxico, a finales de 2015.
Hemos recabado algunas impresiones de docentes y alumnos que hacen que nuestro empeño por generar oportunidades de alfabetización digital en entornos de especial vulnerabilidad que acaben con la brecha existente nos llenen de emoción y orgullo. Los profesores Justo Muavundula y Biablito Baptista nos cuentan que “ProFuturo es la sonrisa de los niños” y que “satisface y disminuye algunos fallos motivacionales de los alumnos”. Entre los estudiantes, Flavio Mateus Wacambo nos hace sonreír porque nos dice que antes de las “clases de buenas maneras” su padre le llamaba “granuja y ahora ha dejado de hacerlo”, y Preciosa Ester Taimbo nos explica que hasta “soñaba con las Aulas Digitales por las noches los primeros días” debido a la ilusión tan grande que le hacía.