¿Cuánto tiempo hace que no dedicas tiempo a la lectura reposada y reflexiva de un texto, un libro o un periódico? Pasamos el día transitando, velozmente, de un WhatsApp a otro, leemos los emails a la velocidad del rayo y, para informarnos, como mucho, ojeamos (porque ya nadie hojea), por encima, los titulares de los periódicos en internet o nos leemos alguna newsletter que los resuma. Seguramente, tú no llegues a leer las últimas líneas de este texto.
Nuestra capacidad de atención y concentración en la lectura está disminuyendo de manera inversamente proporcional a la cantidad de información que nuestra sociedad es capaz de generar. Estamos perdiendo el hábito de la lectura y la comprensión lectora y muchos niños y niñas no llegan ni a desarrollarla. Como explicábamos en este post, el 70% de los estudiantes de 10 años no son capaces de leer y entender un texto simple; y esta cifra se incrementa sustancialmente en las regiones más vulnerables (80% en América Latina y el Caribe, 78% en Asia meridional y 89% en África subsahariana).
La comprensión lectora es una habilidad imprescindible para vivir en la sociedad de la información. Y es que saber leer va mucho más allá de la capacidad de juntar letras y palabras. La comprensión lectora es la capacidad para entender lo que se lee; de identificar los elementos centrales de un texto, interpretarlo y dar nuestra opinión personal sobre él.
Desarrollar la comprensión lectora requiere constancia y ejercicio porque no es algo innato. De la misma manera que, para aprender a resolver ecuaciones, los niños deben dominar las operaciones básicas de suma, resta, multiplicación y división, ser capaz de entender un texto implica mucha lectura. A través de esta el niño podrá ir desarrollando y guardando en su archivo mental los diferentes esquemas que le permitan entender los nuevos textos. Es necesario aprender a obtener información del texto y ser capaces de cuestionarlo. De hacernos preguntas sobre él. Con cada nueva lectura, estos esquemas se van ampliando.
Para hacer esto, además de a la alfabetización básica, los niños necesitan acceder a libros y lecturas en sus idiomas de origen y eso es algo que, en muchos países, no es sencillo. Al menos hasta ahora. Porque esta es una de las áreas en las que la digitalización puede ayudar y mucho a la educación en entornos vulnerables.
En las próximas líneas, ofrecemos seis aplicaciones digitales para adquirir y fomentar el amor por la lectura y desarrollar la comprensión lectora.
La comprensión lectora es la capacidad para entender lo que se lee, identificar los elementos centrales de un texto, interpretarlo y dar nuestra opinión sobre él.
Odilo, lectura digital que se adapta a tu nivel
Odilo es una plataforma digital de gestión de aprendizaje con más de tres millones de títulos disponibles en varios formatos (eBooks, Audiobooks, revistas, prensa…) en 40 idiomas. Además utiliza la inteligencia artificial para medir y mejorar el proceso de aprendizaje y la comprensión lectora. Así, según el nivel, los gustos y la evolución del estudiante, ir recomendándole otros títulos para continuar. Esta tecnología facilita a padres y docentes el seguimiento y acompañamiento de las niñas y niños que usan la plataforma. Si quieres saber más sobre Odilo, aquí tenemos una pequeña entrevista con su CEO.
Canva: aprendiendo a preguntar a un texto
¿Por qué crees que nos siguen gustando los cuentos clásicos? ¿Qué lobos podemos encontrarnos en el mundo actual? ¿Quién era Poseidón? ¿Por qué es importante vencer al Minotauro? ¿Cómo era la época en la que nació Galielo Galilei?… Canva es una web de herramientas de diseño gráfico simplificado que nos ofrece 80 ejercicios de comprensión lectora para que niñas y niños avancen en sus capacidades de comprensión lectora. Entre los ejercicios de lectura, cuentos clásicos, mitología griega y personajes importantes de la historia. Además de los textos, la herramienta proporciona preguntas para ayudar al lector a pensar sobre el contenido de lo que ha leído y a relacionarlo con su contexto y con otros conocimientos.
Crear un mundo de lectores con Worldreader
¿Sabías que el 61% de los niños de comunidades vulnerables no poseen ni tan siquiera un libro? Worldreader pretende ayudar a estos niños que no pueden acceder a la lectura. Y lo hace combinando su enorme biblioteca digital (con casi 6.000 libros en 52 idiomas diferentes), con tecnología (smartphones, tablets, e-readers…), a través de la cual distribuyen su catálogo, y programas de apoyo a profesores y padres. Desde 2010, más de 21 millones de personas se han beneficiado de sus lecturas en 100 países diferentes.
Let’s Read Asia: cuentos en 50 idiomas
Pensemos en Nepal, un país con más de 123 lenguas diferentes. Publicar un libro en uno de esos idiomas no es rentable para ninguna editorial y resulta demasiado caro para las organizaciones locales. Esto significa que muchos niños en el mundo no pueden leer cultivar su amor por la lectura leyendo historias en su propio idioma. Para solucionarlo, The Asia Foundation creó Let’s Read, una biblioteca digital sin precedentes, con libros en 50 lenguas asiáticas, además de en inglés.
Spotify: la música de los libros
No. No nos hemos vuelto locos. La famosa aplicación digital de reproducción de música también puede servirnos para desarrollar la comprensión lectora de los más jóvenes, conectando con sus intereses musicales y con su compulsión por hacer listas de reproducción. La idea nos la dio una ingeniosa profesora brasileña que utilizó Spotify en sus clases de literatura para hacer la lectura de un clásico de la literatura brasilera más motivadora para sus estudiantes. La docente les pidió como trabajo de clase que crearan una lista de reproducción pensando en las canciones que escucharía uno de los protagonistas de la obra. Por supuesto, debían motivar su elección y explicarla después al resto de sus compañeros. El análisis de las letras de determinadas canciones y la interpretación de su significado también es otra forma estupenda de utilizar la música para elevar el nivel de comprensión lectora de los estudiantes.
Booktrailer: lee, imagina y crea un vídeo
Más que una aplicación, el booktrailer aplicado al contexto escolar es un proyecto en sí mismo. Un booktrailer es un pequeño vídeo promocional que se usa para presentar un libro determinado. En este caso, se trata de utilizar la afición por lo audiovisual de los estudiantes para que reflexionen sobre una lectura y elaboren un pequeño video en el que nos cuenten de qué va el libro que han leído y qué piensan de él. El Booktrailer no solo es una herramienta excelente para que piensen sobre la historia que han leído, sino que les permite desarrollar su creatividad, conectar con conocimientos de otras asignaturas y aprender a usar recursos digitales de edición y montaje.
**Foto de portada Pch.vector-Freepik.
