Según la OMS, en el mundo, uno de cada siete jóvenes de 10 a 19 años padece algún trastorno mental, un tipo de trastorno que supone el 13% de la morbilidad mundial en ese grupo etario. La depresión, la ansiedad y los trastornos del comportamiento se encuentran entre las principales causas de enfermedad y discapacidad entre los adolescentes y el suicidio es la cuarta causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 19 años.
Cuidar el bienestar emocional y la salud mental desde los primeros años tiene, a tenor de los datos, una importancia vital. Y en esto la escuela, como primer espacio público de socialización y aprendizaje fuera de la familia, juega un rol esencial. Sin embargo, los sistemas educativos actuales están demasiado centrados en el aprendizaje de determinados aspectos cognitivos y dejan de lado el aprendizaje socioemocional que nos permite gestionar nuestras emociones y las de los demás y desarrollar habilidades y competencias tan importantes como la autoestima, la empatía, la resiliencia o la mentalidad de crecimiento, entre otras muchas.
Las ecuaciones son importantes. Pero igualmente importante es trabajar con niñas y niños su capacidad para reconocer y gestionar sus emociones y las de los demás. Y lo es, además, porque la falta de salud mental afecta directamente a su aprendizaje y a su rendimiento escolar. Problemas de concentración, mal comportamiento, violencia y dificultades de socialización son algunas de las consecuencias más directas e inmediatas de una educación socioemocional inadecuada o inexistente.
En este Podcast de la serie Encuentro Sonoro, de Fundación Telefónica México, las expertas en educación y en gestión de las emociones Angélica Buchán, Cecilia Vicencio e Irma Pérez Campos hablan sobre la importancia de brindar atención socioemocional a docentes, estudiantes y familias, especialmente en este escenario que ha dejado la pandemia de COVID-19 (con muchas escuelas del mundo aún cerradas o a medio gas), que se ha saldado con nefastas consecuencias para la salud mental de muchos ciudadanos.
¿Por qué es importante hablar de atención socioemocional para toda la comunidad educativa? Las funciones esenciales de las emociones, según la psicóloga infantil Angélica Buchán, son sobrevivir y adaptarnos. “Hoy, más que nunca, necesitamos adaptarnos a estos cambios y a esta nueva manera de vivir. Esto nos permitirá gestionar de forma mucho más sana las situaciones que estamos viviendo o las que están por venir”.
Por su parte, la consultora Irma Pérez Campos habla de la importancia que tiene el hecho de que la comunidad educativa pueda tener espacios para compartir y reflexionar sobre sus emociones porque “nuestro proceso de aprendizaje solo va a poder ser efectivo en la medida en la que tengamos este equilibrio emocional y una salud mental adecuada”.
Un factor esencial para que la educación emocional se desarrolle en el contexto educativo es contar con un personal docente bien formado que sepa gestionar sus propias emociones y que estén preparados para desarrollar las habilidades de las y los estudiantes. “Ahí es donde empieza esta cadenita en el bienestar de todas y todos en este regreso a clase”, explica Angélica Buchán.
Por su parte, Cecilia Vicencio, directora de un centro escolar con más de 30 años de experiencia, habla de la importancia de “sentir la escuela como un lugar seguro”.
¿Y qué pasa con las familias? En el podcast también se ofrecen algunas pautas para ayudar a madres y padres a validar el desarrollo socioemocional de sus hijos.
La formación en educación emocional es necesaria para toda la comunidad educativa: docentes, estudiantes, familias y personal del centro. Desde la inclusión de programas de formación hasta la creación y comunicación de redes entre docentes y padres de familia.
Quizás, como en tantos otros ámbitos, la pandemia constituye una oportunidad para que la educación socioemocional adquiera más importancia en los currículos y planes de estudio. Hoy en día existe una gran variedad de programas que promueven el desarrollo de las habilidades socioemocionales en varias etapas de la vida. Sin embargo, y como ya hemos mencionado, dado que las niñas, niños y adolescentes pasan la mayor parte del tiempo en la escuela, desarrollar las habilidades socioemocionales en este contexto es clave (Mateo y Rucci, 2019). En próximos posts nos detendremos de forma más detallada en el aprendizaje socioemocional (SEL, por sus siglas en inglés), así como en sus marcos teóricos y distintas formas de implementación.
REFERENCIAS
Mateo-Berganza, M. y Rucci, G. (2019). El futuro ya está aquí. Habilidades transversales en América Latina y el Caribe en el siglo XXI. BID. Washington D.C.