Aristóteles, Sócrates, Platón, Montessori, Helen Keller… los libros nos cuentan que la historia de la civilización está construida sobre los nombres de unos pocos maestros tremendamente célebres, a quienes todos conocemos y aplaudimos. Los que inspiraron a grandes héroes y consiguieron increíbles hazañas. Sin embargo, la realidad es que detrás de estos poco elegidos, la verdadera historia de la humanidad está pavimentada con los nombres de millones de docentes anónimos. Los que cada día inspiran a muchos niños y niñas a hacer cosas grandes.
La calidad del docente es el elemento más importante y decisivo en el aprendizaje y bienestar de niños y niñas. Lo dice el Banco Mundial y varios estudios que demuestran que la diferencia entre un maestro de mala calidad y uno excelente puede incrementar (o disminuir) el aprendizaje en varios años. También dicen que los buenos maestros tienen un impacto sustancial en el bienestar de los chicos, influyendo no solo en sus logros académicos, sino también en su futuro social y laboral a largo plazo.
Sin embargo, en muchos países faltan docentes y, allí donde los hay, falta formación. Por ejemplo, un estudio reciente del Banco Mundial, en siete países del África subsahariana, mostró que casi una cuarta parte de los profesores de primaria no puede restar números de dos dígitos y un tercio no puede multiplicar cifras de dos dígitos. Sabemos que los sistemas educativos más exitosos, como Singapur o Finlandia, disponen de políticas de apoyo, formación e incentivos para los maestros. Como consecuencia, cuentan con una fuerza laboral docente bien preparada y motivada para potenciar el aprendizaje de sus alumnos.
Hoy más que nunca, necesitamos docentes preparados que vayan mucho más allá de la mera transmisión de conocimiento a la vieja usanza. Necesitamos maestros motivados y capaces de motivar; que manejen nuevas pedagogías y sean capaces de activar en sus estudiantes las ganas de aprender apoyándose en la tecnología; que fomenten la creatividad, el pensamiento crítico, el trabajo en equipo, la empatía y la resiliencia; capaces de adaptarse rápidamente a un contexto que cambia a gran velocidad.
¿Y cómo “construimos” esos docentes? Sin duda, sabemos que se requieren políticas públicas que preparen, formen, acompañen y motiven adecuadamente a los docentes. Pero, también sabemos que el desarrollo profesional docente puede apalancarse en el uso y aplicación de la tecnología.
En este contexto, la organización internacional HundrED, en colaboración con el Banco Mundial y Global Partnership for Education (GPE), han lanzado el informe Teachers for a Changing World Spotlight, una iniciativa que presenta una lista con las soluciones tecnológicas de desarrollo profesional docente con mayor impacto y escalabilidad, a nivel mundial y entre las que, por cierto, aparece el programa ProFuturo. La selección se ha hecho de entre un total de 400 programas provenientes de 80 países. ¿Quieres saber cuáles son?
- Comunidad Atenea (Varkey Foundation), Argentina.- Comunidad Atenea es una red social gratuita destinada al desarrollo profesional de los docentes latinoamericanos y basada en el aprendizaje colaborativo.
- Inspiring Teachers, Reino Unido.- Inspiring Teachers es una plataforma de enseñanza entre pares que ayuda a las escuelas y a sus directoras y directores y apoya a sus docentes fomentando la formación entre pares para que den el salto de buenos a excelentes.
- LeadNow!, Kenia.- Diseñada para entornos con poca tecnología y recursos, LeadNow! utiliza herramientas de capacitación y formación a distancia para equipar a los maestros con las nuevas competencias y la mentalidad que necesitan para respaldar el logro y el bienestar de sus estudiantes frente a los continuos cambios del sistema.
- OneSky, China.- OneSky capacita a las comunidades y a los cuidadores a través de un enfoque innovador de aprendizaje semipresencial que brinda atención y educación temprana de calidad, para aprovechar el potencial de los niños pequeños vulnerables en China, Vietnam y Mongolia.
- PerformED, Egipto.- PerformEd acelera la productividad del aprendizaje registrándolo en tiempo real y proporcionando feedback instantáneo a los profesores. Así crea un ciclo de retroalimentación positiva que empodera a los maestros en el contexto de su desarrollo profesional.
- Puentes educativos, Chile.- Puentes Educativos es un proyecto de capacitación docente, que busca contribuir a mejorar los procesos de enseñanza-aprendizaje en las escuelas públicas del país. A través de talleres, promueven una estrategia pedagógica basada en la aplicación de las habilidades del siglo XXI en educación, y la planificación sistemática de las actividades en el aula. Además de ello, entregan tecnología móvil y recursos educativos digitales que permiten apoyar y complementar la labor de los profesores en el aula.
- Teach2030, Reino Unido.- Teach2030 ofrece cursos de desarrollo profesional digital contextualizados, fáciles de usar, fáciles de escalar que ayudan a los profesores que trabajan en los entornos más desafiantes del mundo a enseñar mejor.
- Tu clase, tu país, Chile.- Una organización profesional sin ánimo de lucro, que aboga por la revalorización de la profesión docente en América Latina, a través de una estrategia de desarrollo profesional personalizada, colaborativa, conectada con la práctica y a lo largo de la vida, que combina el aprendizaje presencial con experiencias de aprendizaje virtual.
- Global School Leaders, India.- Global School Leaders brinda desarrollo profesional a los líderes escolares, combinando capacitación sobre el terreno, talleres participativos e intercambios entre pares para transformar el enfoque de los líderes educativos desde la administración hasta la mejora del aprendizaje de los estudiantes.
- ProFuturo, España.- Dejamos para el final el programa de educación digital del que forma parte este Observatorio. Obra conjunta de la Fundación Telefónica y la Fundación La Caixa, su objetivo es reducir la brecha educativa en el mundo mejorando la calidad educativa de millones de niños en entornos vulnerables. ProFuturo combina la formación docente, con experiencias de aula y recursos educativos para niñas y niños de primaria, para incorporar el uso eficiente y sostenible de la tecnología en sus clases. Para ello ofrece acompañamiento pedagógico y técnico a docentes y centros escolares, al tiempo que realiza seguimiento y evaluación sistemáticos para medir el alcance y funcionamiento del programa, mejorar continuamente y gestionar los aprendizajes que se derivan de la aplicación del programa en más de 40 países.
Estas iniciativas evidencian la importancia que tiene la formación docente en la transformación disruptiva que necesita la educación, una transformación que será imposible sin la correcta inclusión de las tecnologías en el aula y en la comunidad escolar. También pone de relevancia la urgencia por escalar los aspectos centrales de todas estas prácticas innovadoras. A saber: universalizar el trabajo colaborativo y en red entre los docentes; consolidar el liderazgo distribuido entre ellos; fomentar experiencias significativas en el aula, dinamizar la metacognición y el feedback y, en suma, incorporar todo lo que realmente funciona para poder contar con los docentes empoderados y transformadores que la sociedad necesita.