Mimate: Matemáticas “realistas” para todos en Perú

Juegos y canciones para los más pequeños y problemas relacionados con su cotidianeidad para los más mayores. Conectar las Matemáticas con el día a día de los estudiantes es una de las premisas fundamentales de Mimate, un programa de aprendizaje de las Matemáticas originado en Perú en el que los docentes juegan un rol esencial y que ha conseguido resultados muy esperanzadores.

Mimate: Matemáticas “realistas” para todos en Perú

Este Observatorio lo ha contado en múltiples ocasiones: las Matemáticas son una de las áreas de conocimiento que presentan mayor dificultad en el aprendizaje estudiantil, ya sea por el enfoque pedagógico o por las habilidades docentes asociadas a activar el razonamiento matemático. Específicamente en América Latina, Perú registró, en el año 2012, el porcentaje promedio más bajo de la prueba PISA (Programme for International Student Assessment) en la materia: el 75% de sus estudiantes de 15 años tuvieron un bajo desempeño en la prueba de Matemáticas, alertando así de la necesidad de potenciar las acciones públicas y privadas para el fortalecimiento de la enseñanza de esta asignatura.

Este diagnóstico confirmaba lo que el Instituto Apoyo, una organización de la sociedad civil especializada en el desarrollo de programas educativos, ya había identificado como una problemática del sistema educativo peruano en el año 2001. Ese mismo año iniciaron un proyecto de innovación pedagógica en Matemáticas, diseñando una nueva forma de solución efectiva para afrontar el problema del aprendizaje dentro del aula. La iniciativa, que tomó el nombre de Matemática para todos (Mimate), ha concentrado su atención en el desarrollo de procesos de enseñanza-aprendizaje para desarrollar una mejor comprensión, rendimiento y gusto por estas.

Matemáticas “realistas”

Mimate

Foto: Instituto Apoyo.

Mimate se sustenta en el enfoque de Educación Matemática Realista (EMR), que utiliza situaciones de la vida cotidiana o problemas del contexto local del estudiantado como punto de partida para fomentar su interés y motivación por la asignatura. ¿Cómo se traduce esto en la práctica? En educación inicial, las acciones se concentran en la ejecución de actividades de ordinalidad o del razonamiento que se ocupa de la sucesión o el lugar que ocupa una entidad o cosa en una sucesión ordenada y que permiten el desarrollo de habilidades en el campo numérico y espacial. En el nivel de secundaria, los problemas matemáticos se vinculan con ámbitos científicos o económicos, y ayudan a los estudiantes a comprender el sentido y relevancia de esos conocimientos, reconociendo así la importancia práctica del aprendizaje de las Matemáticas.

El carácter innovador de estas acciones se deriva del distanciamiento que realizan del proceso de enseñanza-aprendizaje tradicional, basado en la memorización de contenidos, hacia una mirada que releva las matemáticas como una actividad humana cotidiana y que ayuda a desarrollar habilidades necesarias para resolver los problemas del día a día de los estudiantes.


El carácter innovador de MIMATE se deriva del distanciamiento que realizan del proceso de enseñanza-aprendizaje tradicional, basado en la memorización de contenidos, hacia una mirada que releva las matemáticas como una actividad humana cotidiana y que ayuda a desarrollar habilidades necesarias para resolver los problemas del día a día de los estudiantes.

Los docentes como articuladores de la necesidad local

Foto: Instituto Apoyo.

De acuerdo con las estadísticas del Instituto Apoyo, al año 2022 el programa ha logrado escalar a más de 10.000 colegios, 62.000 docentes y más de 2 millones de estudiantes, y tiene presencia en Perú, México, Ecuador, Bolivia y Paraguay. En todos ellos se reconoce que los equipos docentes y directivos son clave al momento del éxito del proyecto, “el motor de la iniciativa”, según su directora de Innovación y desarrollo, Carola Huachaca. Su compromiso y su motivación con la iniciativa es tal que, en el caso de provincias rurales aisladas, existen registros de profesionales que se desplazan directamente a los hogares de los y las estudiantes para que asistan a la escuela, dado que sus familiares tienden a preferir que los ayuden en labores agrícolas y/o de ganadería. Este tipo de acciones son una muestra tangible del vínculo que el profesorado adquiere con Matemática para Todos, ya que el apropiarse de la metodología comienzan a movilizar diversos recursos y estrategias para que sus estudiantes activen su gusto por la matemática y su interés por ir a la escuela. ¿Cómo se produce esta vinculación? ¿Qué lleva a los docentes a adquirir este grado de compromiso?

Carola Huachaca menciona que las y los docentes involucrados se sienten “fascinados” con los casos prácticos del programa y con la conexión que estos realizan con las matemáticas. Por ejemplo, Mimate promueve que el estudiantado realice ejercicios basados en cálculos con unidades de medida del día a día (litros, kilogramos, etc.), lo que permite que se desarrolle sin la necesidad del proceso de abstracción tradicional. En el caso de estudiantes de secundaria, en las clases se aborda el Impuesto General de Ventas (IGV) y de cómo afecta ello el pago de sus consumos diarios, conectando así los porcentajes a la realidad local. Como explica Huachaca, «para dar una clase de Matemáticas, tienes que ver cómo está el aula. Si el aula está desmotivada o estresada, por más que te esfuerces, las Matemáticas no van a tener impacto«; y precisamente ese conocimiento práctico, solo lo pueden tener los docentes.

El nivel de interés que han presentado las y los docentes partícipes en la iniciativa ha favorecido que, una vez que cuentan con las herramientas teórico-prácticas promovidas por el enfoque EMR, estos generen sus propias estrategias de enseñanza, fortaleciendo así el principio de reinvención: «Aprenden estrategias y ellos las reinventan”, señala la directora. “Nosotros les enseñamos a hacer dominó con cálculos matemáticos sencillos y ellos generaron rompecabezas; al conocer la estrategia, lo pueden transformar en juego».

Las y los docentes no solo son los articuladores de Mímate, también se han convertido en actores estratégicos que permiten la continuidad y expansión masiva del proyecto en el tiempo. Gracias a la participación de la comunidad educativa, el programa ha generado un fuerte enfoque territorial que ha posibilitado su adaptación a las necesidades de poblaciones rurales, con alto índice de vulnerabilidad social.

Las y los docentes no solo son los articuladores de Mímate, también se han convertido en actores estratégicos que permiten la continuidad y expansión masiva del proyecto en el tiempo.

Consolidación de ‘Matemática para Todos’

Mimate

Foto: Instituto Apoyo.

Después de sus primeros 10 años de funcionamiento, con más de 60 escuelas intervenidas, el Instituto Apoyo presentó al Ministerio de Educación los resultados positivos de la intervención en los aprendizajes de niños, niñas y jóvenes contrastándolo con centros educativos que no formaban parte de la iniciativa.

El Ministerio de Educación de Perú decidió lanzar un plan piloto del modelo Mimate en las regiones de Huancavelica, Ayacucho y Angares, algunas de las más pobres del país y donde los donde los puntajes de PISA fueron más bajos. Los resultados de este piloto fueron evaluados por el centro de investigación J-Pal, en un estudio que incluyó a 2.926 niñas y niños de educación preescolar, en 107 escuelas de estos departamentos.

La evaluación encontró que el programa mejoró los resultados globales en Matemáticas para todos los estudiantes, sin efectos diferenciales de género, nivel socioeconómico o lengua materna. La evaluación también reflejó que los profesores de Mimate estaban más preparados con sus lecciones y tenían más paciencia para explicar las actividades a los alumnos que no las entendían. En promedio, los alumnos del programa MiMate mejoraron su desempeño en matemáticas en seis puntos porcentuales más que el grupo de control después de un año escolar. Este efecto positivo general estaba disperso entre numerosos temas de la prueba: comparar cantidades, reconocer formas, contar, seleccionar números y denominarlos, así como en composición aditiva, problemas de sumas y restas, y formas geométricas. Los alumnos que tenían menos conocimientos experimentaron los mayores avances. Los resultados también mostraron que los alumnos cuyos profesores tenían un título universitario (en Perú es posible acceder a la profesión docente desde la universidad o desde una escuela de formación), mejoraron más. Los investigadores sugieren que los profesores mejor cualificados enseñaron el programa con mayor eficacia. Disponían de más tiempo para cubrir los materiales y tenían una visión más positiva de la enseñanza de las matemáticas.


La evaluación encontró que el programa mejoró los resultados globales en Matemáticas para todos los estudiantes, sin efectos diferenciales de género, nivel socioeconómico o lengua materna.

Con esta importante acción de incidencia pública y los resultados del programa piloto, lograron que, en 2014, el Estado incluyera dentro de su programa curricular el enfoque de EMR y que en los libros escolares ministeriales estuviera presente como parte de la estrategia nacional de enseñanza de la Matemática.

El Instituto Apoyo ha continuado su labor de expandir el modelo a más escuelas dentro y fuera del país, desarrollando alianzas estratégicas con actores públicos y privados, apalancando nuevos recursos para dotar de sostenibilidad financiera y crecimiento al modelo de trabajo. Actualmente, el Instituto se encuentra en fase de actualización de sus libros de texto, sistematizando las experiencias e innovaciones que han surgido desde los territorios y los grupos docentes y adecuando la oferta a las necesidades presentes y futuras del sistema educativo peruano. 

Los recursos y experiencia que se han generado en Perú durante los últimos 20 años, gracias a la labor desarrollada por Matemática para Todos, permite mostrar a otros países de la región, un ejemplo concreto de innovación en el campo de la enseñanza de la matemática. El esfuerzo del Instituto Apoyo en la aplicación y masificación de EMR es una buena práctica que ayudaría a reducir en parte uno de los desafíos de mayor urgencia en América Latina, como es el desarrollo y fortalecimiento de habilidades matemáticas en la región.

Referencias

Näslund-Hadley, E. (2015, 1 de julio). Habilidades pre-matemáticas que suman. Blog Enfoque Educación (BID). https://blogs.iadb.org/educacion/es/habilidades-pre-matematicas-que-suman/

J-PAL. (s.f.). Changing Pedagogy to Improve Math Skills in Preschools in Peru. En https://www.povertyactionlab.org/evaluation/changing-pedagogy-improve-math-skills-preschools-peru?lang=fr

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