¡¡¡Estás loco!!! ¡¡¡Eso nunca se ha hecho así!!! ¡¡No te compliques la vida!! Son las advertencias que las mentes creativas e innovadoras deben escuchar en cansina letanía durante toda su vida. ¿Por qué hacer las cosas de manera diferente si es mucho más cómodo seguir haciéndolas como siempre? Sin embargo, gracias a las personas curiosas, a las mentes inquietas y apasionadas, hemos salido de la caverna prehistórica y llegado hasta el espacio; trasplantamos corazones y nos codeamos con inteligencias artificiales varias veces al día.
“Frente a los numerosos desafíos del porvenir, la educación constituye un instrumento indispensable para que la humanidad pueda progresar hacia los ideales de paz, libertad y justicia social”. Si esto era cierto en 1996, cuando lo dijo Jaques Delors, es infinitamente más cierto hoy, cuando los acelerados cambios tecnológicos, sociales y climáticos, entre otros, están reconfigurando el orden mundial, tal y como lo habíamos conocido hasta ahora. Porque puede que hace unos años, la uniformidad y, en cierta manera, la mediocridad, fueran lo deseable en un sistema educativo que surgió para respaldar a la naciente Revolución Industrial. Sin embargo, hoy, la creatividad y el espíritu innovador son más necesarios que nunca; y por eso debemos fomentarlos desde la escuela.
En el prólogo de la publicación Escuelas creativas. Un viaje hacia el cambio educativo, Ferrán Adriá se plantea una cuestión fundamental: ¿podría la osadía creativa de El Bulli, con la que se revolucionó el mundo de la gastronomía, servir de base para comenzar una revolución educativa? En esta pregunta se encuentra la base de Escuelas Creativas, un proyecto conjunto de Ferrán Adriá y Fundación Telefónica, nacido con el objetivo de impulsar la innovación y la creatividad en los centros educativos aplicando la metodología de elBulli.
El origen de la idea fue una exposición: Ferrán Adriá. Auditando el proceso creativo, un recorrido en el que el espectador se sumergía en el universo creativo del chef catalán. En un espacio de más de 1.000 metros cuadrados, el visitante entraba en contacto con los recursos, el proceso, los líderes y la cultura creativa que propiciaron que elBullirestaurante pudiera desarrollar un sistema creativo de carácter disruptivo e innovador (elBullifoundation, 2022). Allí, como parte de las actividades, se hizo un taller con centros educativos donde se les planteó el reto de pensar en los cambios que podrían hacer en su centro inspirándose en el proceso creativo de Adrià. Y aquello funcionó. Mezclar dos mundos aparentemente tan dispares como la cocina y la escuela dio resultado.
El proyecto Escuelas Creativas proponía un reto a las escuelas: adecuar la metodología de elBulli al ámbito educativo para transformar sus centros a través de la creatividad y la innovación. Porque la innovación y el cambio dependen menos de leyes, reformas y metodologías mágicas que de proyectos educativos desarrollados por cada comunidad educativa y de prácticas profesionales (Escuelas creativas. Un viaje hacia el cambio educativo, 2017).
Los centros educativos debían presentar un reto de transformación del centro, en el que planteaban qué querían cambiar, por qué y para qué. Un jurado, formado por un comité de expertos se encargó de seleccionar a los participantes (17 centros, de diferentes etapas educativas) que aplicarían la metodología Sapiens, una metodología de investigación, desarrollada por Adriá, para crear, innovar y reorientar una determinada realidad, a partir del conocimiento profundo y la comprensión.
La metodología Sapiens
La metodología Sapiens ayuda a conectar el conocimiento y sirve para comprender, primero, y actuar después. Comprender para crear. El conocimiento y la comprensión adquiridos nos permitirán visualizar y diseñar posteriormente una estrategia de innovación y creatividad. Sapiens permite documentar, ordenar y clasificar. La exposición lo explica de la siguiente manera:
- Ordena: el orden es la eficiencia. Hay que ordenar el conocimiento y los datos: los elementos, los objetivos, las prioridades…
- Contextualiza: una vez que hemos ordenado toda la información, debemos llevar a cabo un análisis exhaustivo de la información para delimitar nuestro objetivo.
- Clasifica: para que la información se convierta en conocimiento tiene que ser accesible, es decir, tiene que clasificarse. “Clasificar todos los elementos de una misma disciplina o campo nos permite saber qué conocemos y qué nos falta por conocer”, se explica en la exposición Comprender para crear.
- Imagina: para poder analizar bien tu objetivo, debes imaginar cómo ha llegado hasta el momento actual y cuáles han podido ser las herramientas y las técnicas usadas para conseguirlo.
- Crea: ¿sabes las mil formas que puede adoptar la famosa receta de pan con tomate? Un elemento sencillo como es el tomate se puede presentar en formas diversas: creando espuma de tomate, tomate crujiente, mousse de tomate, entre otros… Apliquemos este ejemplo a nuestro problema u objetivo.
- Comprende: comprender para crear culmina con la creación de un mapa. Para poder tener una visión global de todo el proceso, crearíamos un mapa con todos los conceptos que acabamos de citar. El mapa nos permite establecer relaciones y observarlas para imaginar posibilidades disruptivas o innovadoras.
Los centros seleccionados analizaron sus fortalezas y debilidades y se marcaron una estrategia con un gran objetivo. Por ejemplo:
- La Escuela de Arte y Superior de Diseño de Soria querían cambiar su metodología de enseñanza para hacerla menos tradicional y más participativa. Para ello crearon un proyecto de centro que llevó las actividades de la escuela al exterior. Salir a la calle y usar la ciudad como “laboratorio de aprendizaje”.
- En el IES Enrique Tierno Galván de Moncada en Valencia, su reto era cambiar el espacio físico del centro, haciéndolo más amable y menos gris, para mejorar el clima de convivencia del centro. Para ello crearon un aula abierta, en el patio, en la que han implicado a todo el municipio.
- En el centro de educación especial Eusebio Martínez de Alcantarilla, en Murcia, se plantearon el reto de crear un laboratorio, el EusebioLab, para investigar a través del arte y sus repercusiones en el desarrollo de las capacidades de los alumnos. Así buscaron formas para que sus alumnos se hicieran ver y oír a través del arte escénico, plástico y visual.
Con todo, el objetivo principal de lo propuesto en este proyecto se enfocaba en la mejora de cada uno de los alumnos. De ahí cobra sentido el que se promueva una visión de transformación y cambio educativo que busque dar un giro hacia la creatividad, elemento central de la evolución del ser humano. Implica, por tanto, saber cómo impulsar las ideas que se tienen, potenciar el trabajo en equipo, mejorar el conocimiento del centro, saber dónde se está y hacia dónde se puede ir, buscar la enseñanza a través y con la creatividad, reconocer la necesidad de pensar y debatir, gestionar mejor el cambio, movilizar al claustro y a la comunidad educativa (sumando miradas y talentos), ser más creativos en los procesos, aprender de los errores y aprender a que la evaluación de la creatividad es camino crítico para crecer como personas libres y empoderadas
Uno de los aspectos más determinantes del proyecto fue la involucración de docentes y profesionales de la educación en la adaptación y elaboración de los materiales de apoyo y en el proceso de acompañamiento y asesoramiento a los centros. Todo este trabajo se plasmó en la elaboración de materiales de apoyo pensados por educadores y profesionales de la educación para educadores y otros profesionales de la educación.
Entre los materiales, sobresalen especialmente cinco guías que han trasladado al lenguaje y a las prácticas educativas las ideas que sobre innovación y cambio y sobre el proceso creativo han desarrollado en los últimos años Ferran Adrià y elBulliFoundation.
Las guías tienen como objetivo ayudar y apoyar a los centros educativos y a los docentes en los procesos de cambio e innovación. Ayudarles a generar ecosistemas de aprendizaje creativo. Podemos agruparlas en dos bloques: según estén orientadas a nivel de centro (Sapiens de centro, Genoma de centro), o a nivel de aula y de procesos de enseñanza/aprendizaje (EduSapiens, Mi genoma creativo, Menú de aprendizaje). ¿Cuáles son y cómo usarlas para transformar la educación?
Sapiens de centro
Es una guía útil para cualquiera que piense que la creatividad y la innovación son las palancas que nos hacen progresar como sociedad y como individuos. Su objetivo es promover e impulsar la transformación de los centros educativos ayudando a sus docentes, equipos directivos, de gestión y de innovación en sus procesos de transformación. Parte de la necesidad de una comprensión profunda de aquello que quiero transformar. Está pensada para ayudar a generar e implementar un plan de transformación en centros e instituciones educativos y tiene material complementario que facilita la reflexión, la eficiencia y la creatividad en los distintos pasos del proceso.
Genoma de centro
Está dirigida a todos los integrantes de un centro educativo y tiene como objetivo realizar una reflexión sobre la personalidad creativa desde tres visiones: la personalidad creativa del líder, la del equipo y la de la comunidad educativa en su conjunto.
EduSapiens
Está pensada principalmente para docentes, y en ese sentido se hace una propuesta paso
a paso para el diseño de experiencias educativas, pero también se ofrecen muchas herramientas para su aplicación en el aula por parte de los alumnos.
Mi genoma creativo
Está pensada principalmente para docentes, que confían en el potencial creativo de su alumnado y, en ese sentido, se hace una propuesta paso a paso para el diseño de experiencias educativas, y se ofrecen muchas herramientas para su aplicación en el aula
por parte de los alumnos. Aporta una serie de propuestas para que el alumnado pueda realizar una autoevaluación y descubrir los superpoderes creativos que tienen, sean conscientes de su potencial creativo y de que esos se pueden entrenar y mejorar a través de las experiencias cotidianas del aula.
Menú de aprendizaje
Es una guía para docentes que tiene como objetivo ayudarles a programar de manera divergente y cuestionar las prácticas de aula, perdiendo el miedo a ser creativos al planificar las clases. En esta guía se recogen algunas de las técnicas de creatividad que se utilizaron en elBulli, adaptadas al ámbito educativo: inspiración, adaptación y asociación.
Hace algo más de 30 años Ferrán Adriá inició un movimiento gastronómico que desbarató completamente los cimientos de la cocina tal y como los habíamos conocido hasta aquel momento. En 2014 se le ocurrió, en colaboración con Fundación Telefónica y un grupo de educadores, llevar los fundamentos de su revolución creadora al mundo de la educación. Hoy todos estos materiales están disponibles para todos aquellos que quieran ponerlo en práctica.
