Historias

“Soy Joanne Presentacion Suarez, 30 años, filipina y casada con un hijo que vive en Sitio Talipanan, Puerto Galera, Mindoro Oriental”. Así se presenta Joanne, maestra en la escuela Talipanan Mangyan. «Vivir con felicidad es un precioso regalo de Dios para la familia. Esta es la forma en que vivo con mi familia y trabajo en mi campo de la enseñanza». 

La escuela Talipanan Mangyan se encuentra al pie del monte Malasimb y actualmente acoge a 301 alumnos de esta ciudad de Filipinas. Hace cuatro años, ProFuturo aterrizó en las aulas de Joanne gracias a la colaboración con la Fundación Ayala. Esta maestra de quinto curso asegura que la llegada de las tabletas de ProFuturo ha sido una fuente de inspiración para enseñar y aprender a través de los materiales didácticos en línea.

Con la llegada de la COVID-19, muchos de los colegios filipinos del programa consiguieron reinventarse para asegurar la continuidad del aprendizaje. Así, dieron lugar a un nuevo proyecto: TabLend.

La iniciativa, actualmente implantada en las regiones de Puerto Galera y El Nido, se basa en el préstamo de tabletas a alumnos de 4º y 6º de primaria. De esta forma, los niños y niñas de los 30 colegios beneficiados (17 en Puerto Galera y 13 en El Nido), pueden seguir con el aprendizaje desde la seguridad de sus hogares. 

TabLend nace con el objetivo de poder utilizar el material tecnológico cuando resulta imposible continuar con las clases presenciales a causa de la COVID-19. Además, la iniciativa también supone una reducción de los fondos destinados a la impresión de los materiales escolares. Actualmente, el proyecto cuenta con 2.605 tabletas en uso y beneficia a 1.943 niños y niñas entre las escuelas de las regiones mencionadas.

La llegada de TabLend al colegio de Joanne llevó a esta maestra a pensar una manera de incluir a los padres y madres de los alumnos del centro en la vida educativa a través de la tradición local: el tejido artesanal. De esta forma, las madres comenzaron a tejer fundas protectoras para los dispositivos de ProFuturo que los alumnos, y también sus hijos, llevaban a casa cada semana.

“En nuestra localidad, el tejido es la principal fuente de ingresos de casi todas las madres de nuestros alumnos, Es una obra de arte que los Iraya Mangyan han heredado de sus antepasados. Como profesora y segunda madre de mis alumnos, quiero inculcarles la importancia de cuidar las cosas que nos han sido dadas”.

“Cuando observé las reacciones de todas las madres de mis alumnos al usar las tabletas, surgió la idea de cómo puedo aplicar las habilidades de tejido de estas mujeres al proyecto”. Y así nació CARE, el proyecto que reúne a mujeres como Nena Caurang o Karina Pampilo, tejedoras, madres de alumnas del Talipanan Mangyan y, ahora, partícipes del buen funcionamiento de TabLend. 

Nena y Karina son nativas de Talipanan, en Puerto Galera. Llevan diez años tejiendo y preservando esta tradición milenaria. “Lo aprendí de mis padres. Es muy importante para mí porque es el legado de mis padres y lo disfrutamos”, asegura Nena. Cuando Joanne les propuso tejer estas fundas para transportar las tabletas de ProFuturo no dudaron un momento. “Joanne nos dio el diseño y el tamaño. Tardamos dos semanas en tejerlas”, cuenta Karina. 

En el futuro, TabLend quiere conseguir maximizar el uso de los recursos digitales de ProFuturo y trabaja para mejorar la competencia de los alumnos en materia de TIC mediante lecciones y actividades bien planificadas. Por su parte, dentro de su plan de expansión, TabLend quiere llegar a 95 nuevas escuelas de las regiones de Mimaropa, islas Palawan y Mindoro, Romblon y Marinduque. 

Joanne, Nena y Karina confirman los beneficios que TabLend ha supuesto en la vida de los niños y niñas de este centro de Puerto Galera. El aprendizaje personalizado a cada alumno, la motivación de los mismos durante el proceso educativo y el refuerzo de la colaboración entre docentes y padres, han permitido unir a esta comunidad a través de la educación.