Aprender a enseñar en entornos de refugio: desafíos y oportunidades

Enseñar en un campo de personas refugiadas o desplazadas no es fácil. Sin embargo, la tecnología puede proporcionar a los docentes en estos entornos oportunidades de desarrollo profesional para mejorar su formación y mejorar la calidad de los aprendizajes de sus estudiantes. En este artículo hablamos de los retos y oportunidades del desarrollo profesional docente con tecnología en entornos de refugio.

Aprender a enseñar en entornos de refugio: desafíos y oportunidades

¿Sabías que la calidad entre un docente malo y uno excelente puede disminuir o incrementar el aprendizaje de sus estudiantes en varios años? La calidad de los docentes es el elemento más importante y decisivo en el aprendizaje y bienestar de niñas y niños.

En entornos de desplazamiento y refugio, los docentes deben hacer frente a desafíos extraordinarios que se suman a los que ya existen en entornos vulnerables: deben asegurar un entorno de aprendizaje seguro, apoyar las necesidades emocionales de niñas y niños que han vivido y viven situaciones extremadamente complicadas, fomentar la cohesión social… Por si fuera poco, en la mayoría de los casos, esos docentes son personas refugiadas que están experimentando las mismas dificultades que sus estudiantes: problemas económicos, tensión emocional, inseguridad e incertidumbre constante en torno a sus vidas.

Por eso, además de las necesidades educativas de las niñas y niños en situación de desplazamiento o refugio, es preciso insistir también en las de sus docentes: los profesores necesitan formación específica y ayuda.

Docentes en entornos de refugioEn estas circunstancias, la tecnología podría suponer un gran apoyo para el desarrollo profesional docente en entornos de desplazamiento o refugio. Las tecnologías digitales pueden brindar a los educadores acceso a contenidos de aprendizaje profesional de calidad para enriquecer su práctica en el aula, apoyar la enseñanza y el aprendizaje de calidad en su contexto local y fomentar su desarrollo profesional. También podría brindarles la posibilidad de conectarse con sus compañeros a través de comunidades de práctica virtuales y locales para compartir recursos y experiencias y crecer mutuamente en una red de apoyo.

Sin embargo, estas soluciones formativas digitales deben estar bien diseñadas para responder plenamente a las necesidades de esos docentes que viven una situación extremadamente difícil y particular. Como explica la Red Interagencial para la Educación en Situaciones de Emergencia (INEE), el ecosistema de la educación en situaciones de desplazamiento es complejo y carece de recursos suficientes en todos los niveles. Muchos profesores en entornos de refugio carecen parcial o totalmente de conectividad. Frecuentemente, los docentes tampoco tienen ni los conocimientos personales ni una guía para encontrar oportunidades de formación ricas, diversas y pertinentes.

Basándose en su experiencia de años sobre el terreno, INEE ha elaborado un informe que identifica los grandes retos y oportunidades del desarrollo profesional docente digital en entornos de desplazamiento y refugio y elabora una serie de recomendaciones para sacar el máximo partido de las nuevas tecnologías en la formación docente en estos entornos. Aquí hemos resumido las principales conclusiones de ese informe en torno a los retos y oportunidades.

La tecnología puede suponer un gran apoyo para el desarrollo profesional docente en entornos de desplazamiento o refugio.

Los retos: faltan datos, contextualización y apoyo al docente

Lagunas en la investigación y los datos. La investigación sobre el sobre el desarrollo profesional docente digital, los recursos educativos en abierto (REA) y el aprendizaje profesional docente en entornos de refugio es bastante limitada. Las investigaciones en curso, limitadas y anecdóticas, se ven dificultadas por la falta de datos disponibles (los datos sobre la educación en entornos de refugio son difícilmente rastreables) y por la falta de financiación, entre otras cosas.

Falta de coherencia y sostenibilidad en el diseño de los programas de desarrollo profesional docente. Aunque existen algunas directrices para el desarrollo profesional docente en contextos de emergencia o crisis, muchos agentes sobre el terreno no tienen en cuenta las necesidades locales (exigencias lingüísticas específicas, retos de conectividad, fluidez digital o intereses y necesidades de los educadores). Además, muchas veces, las iniciativas se centran en aspectos específicos, aislados, sin conectarlos a esfuerzos más amplios ni crear planes sostenibles para su uso e impacto continuados.

Desarrollo limitado de la apropiación y el liderazgo locales. Los esfuerzos de desarrollo profesional docente digital no aprovechan la experiencia, el liderazgo y la apropiación locales para apoyar la sostenibilidad de los proyectos. Como consecuencia de esto, aunque populares, los modelos de formación de formadores suelen desaparecer a medida que se disipa el apoyo externo, financiero o de otro tipo.

No se usa la experiencia, la capacidad de acción y la resistencia de los profesores. La experiencia, los conocimientos, y la acción de los profesores suelen pasarse por alto. Los profesores pueden ser socios cocreativos en el desarrollo de materiales digitales de desarrollo profesional docente, y pueden ayudar a difundir y apoyar la adopción de recursos, incluso mediante la introducción de nuevas tecnologías y herramientas a sus colegas.

El alto coste de las tecnologías básicas en contextos con menos recursos. El centro de datos de la UIT indica que el coste de la “cesta de bajo consumo de datos móviles y voz”, una solución común disponible en contextos de desplazamiento y con menos recursos, era del 38% de la renta nacional bruta per cápita en Níger en 2021, del 25% en Chad, del 4,5% en Kenia, del 3,9% en Líbano, y por debajo del 1% entre las naciones más ricas.

Problemas de visibilidad, accesibilidad y facilidad de uso. En muchas ocasiones los docentes manifiestan dificultades para encontrar y usar con confianza los recursos digitales. No basta con compartir las URL de los recursos; en muchos casos, los profesores necesitan más apoyo para familiarizarse con los recursos, evaluarlos y adaptarlos a sus necesidades locales y, en última instancia, sentirse seguros y competentes en el uso de nuevos recursos o herramientas.

Desmotivación y desmoralización del profesorado. En los contextos de desplazamiento, los profesores de los niños más desfavorecidos y marginados suelen estar ellos mismos en desventaja, tanto a nivel personal como profesional. Por tanto, motivar la participación y mantenerla a lo largo del desarrollo profesional docente digital es un reto importante que hay que superar para garantizar el éxito de las iniciativas y un impacto positivo y duradero.

No se prioriza la seguridad y el bienestar del docente. Al igual que las niñas y niños a los que enseñan, los docentes también necesitan sentirse seguros, incluidos y apoyados antes de pedirles que asuman retos adicionales.

Faltan vías de reconocimiento y certificación. Los educadores en contextos de EiD necesitan reconocimiento, certificación y vías de acceso a programas de titulación o acreditación, especialmente si son desplazados sin experiencia profesional previa en el campo de la educación, no tienen documentos que indiquen su experiencia o aprendizaje previos, o tienen credenciales que no están reconocidas en su entorno de desplazamiento.

Las oportunidades: la educación digital ahora es parte de la Agenda

La educación a distancia es ahora parte integrante de la educación global. La importancia y ubicuidad de la educación a distancia se hizo innegable con la COVID-19. De ahí que exista un gran interés en el ecosistema educativo mundial por utilizar de forma eficaz y equitativa los materiales y herramientas digitales de aprendizaje. Esto es una oportunidad para hacer que el desarrollo profesional docente digital sea más accesible, equitativo, atractivo e impactante.

La brecha digital en educación y las cuestiones relacionadas con la equidad educativa se han hecho más presentes. En los últimos años han aumentado las brechas en el acceso digital y en la alfabetización y fluidez digitales, inducidas por muchos retos, como la falta o limitación de infraestructuras. Y, cada vez más, los diseñadores pedagógicos, junto con los actores de la educación, el desarrollo y el sector humanitario, están diseñando y/o utilizando opciones para proporcionar acceso offline a materiales digitales. También se han forjado alianzas púbico-privadas para abordar específicamente el acceso a la electricidad, Wi-Fi, dispositivos y alfabetización digital.

Los dispositivos móviles son (más o menos) omnipresentes. Las estadísticas mundiales indican que hay más de 6.500 millones de usuarios de teléfonos inteligentes en el mundo. La mayoría de los profesores, incluso en las zonas más remotas, tienen teléfonos inteligentes, aunque no sean de última generación y aunque no siempre puedan cargarlos y conectarse debido a la limitada infraestructura eléctrica y/o Wi-Fi. De este modo, los profesores están encontrando su camino hacia el desarrollo profesional docente digital en muchas partes del mundo.

Se están encontrando soluciones creativas para ampliar el desarrollo profesional docente. Cada vez se es más consciente de la necesidad de encontrar y utilizar las tecnologías más convenientes para cada contexto. Sin duda, la tecnología formará parte de cualquier oferta de desarrollo profesional docente, pero debe funcionar en línea, fuera de línea y en formatos mixtos.

Los docentes están en el centro del debate. La importancia crítica de los profesores en el ecosistema educativo y la necesidad de atraer, retener y mantener a los docentes a través de una revalorización global de la profesión, fue un tema transversal de la Cumbre para la Transformación de la Educación de la Unesco celebrada en octubre de 2022.

Los docentes son la clave del éxito de cualquier sistema educativo y los entornos de desplazamiento y refugio no son una excepción. Es más: podría decirse que en estos contextos, el rol del docente es más importante aún si cabe pues son, en muchas ocasiones, el único recurso educativo disponible para los estudiantes. Proporcionarles ayuda, apoyo y desarrollo profesional de calidad y adaptado a su situación es fundamental para garantizar las oportunidades de futuro de millones de niños que dependen de ellos.

También podría interesarte