ProFuturo llegó a Asia en 2017 con la implementación del proyecto en 31 escuelas de Filipinas en las regiones de Palawan y Mindoro Oriental. De ahí, saltamos a Líbano, donde empezamos a adaptar muestro Modelo Integral de Educación Digital a contextos de crisis y conflicto en colaboración con la Fundación Entreculturas-Fe y Alegría y el Servicio Jesuita al Refugiado (JRS) para acercar la educación digital de calidad a refugiados sirios. Desde 2020, trabajamos, además, con refugiados iraquíes en contextos de educación informal en Jordania.